La mayoría de los dulces japoneses pertenecen a la familia de los dulces llamados wagashi estos dulces surgen durante la restauración Meiji alla por 1868 y se elabora típicamente a partir de ingredientes naturales y vegetales, estos dulces normalmente sirven para acompañar el té verde, estos dulces son muy elaborados y no cualquiera puede hacerlo ya que todos se realizan a mano y requiere de una gran destreza.
Depende la epoca del año se relizan distintos tipos de wagashi, ya que estos dulces estan inspirados en las cuatro estaciones e incluso se usan frutos de temporada, así que si viajas a Japón no encontraras los mismo dulces en primavera que en invierno.
A menudo, los dulces se preparan cuando se realiza la ceremonia del té, así que ya imaginaras la importancia que estos dulces tienen en Japón, y si los has probado no podrás negar que son deliciosos tu paladar podrá disfrutar de su esquisto sabor y tus ojos disfrutaran de sus hermosas formas.
La mayor parte de estos dulces utilizan el wasabon que es un tipo de azúcar natural producida en la zona de Shikoku, cuando surgió el wagashi utilizaban este endulzante porque en la era Meiji era muy difícil conseguir azúcar blanca, y así es que gracias al wasabon (un tipo de azúcar amarilla muy fina) los dulces japoneses consiguen su sabor tan distintivo.
En casi todo lo que se haga en Japón la presentación visual es de gran importancia y la cocina japonesa no es la excepción, los dulces tienen formas artísticas de plantas o animales y para presentarlos suelen colocarlos en vajillas especialmente elegidas por su belleza.
En casi todo lo que se haga en Japón la presentación visual es de gran importancia y la cocina japonesa no es la excepción, los dulces tienen formas artísticas de plantas o animales y para presentarlos suelen colocarlos en vajillas especialmente elegidas por su belleza.
En fin puedes disfrutar viendo una gran variedad de dulces wagashi de los que se encuentran fotos en Internet cada uno mas colorido y apetitoso que el anterior y de formas muy originales, siempre inspirados en la naturaleza, esta es una de las cosas que tanto niños como adultos deben probar por lo menos una vez en la vida.


